Sinopsis
Thaddeus Walker Bowman Owens, el quarterback suplente de los Chicago Stars, es un jugador con mucho espíritu de equipo y aún más talento para chupar banquillo, modelo ocasional de ropa interior y con una bajísima tolerancia a las divas.
Olivia Shore, cantante de ópera y superestrella internacional, es una diva perfeccionista, con un gran sentido de la justicia, demasiados secretos y un resentimiento monumental contra el deportista egoísta, vulgar y mediocre con el que se ha visto irremediablemente atrapada.
No es de extrañar que cuando ambos se embarcan en la gira publicitaria de una marca de relojes de lujo se produzca una auténtica explosión, en la que no falta ni el sarcasmo ni las pullas, con unas dosis de drama entre bastidores y algún que otro pase de balón. Aunque lo que realmente les va complicar la vida son unas cartas amenazantes, unas inquietantes fotografías y una serie de desagradables encuentros. ¿Quién hay detrás de todo eso? ¿Es solo un fan demasiado entusiasta o algo más siniestro?
Tierna y divertida, apasionada y perspicaz. Esta irresistible aventura romántica te demostrará que cuando dos superestrellas colisionan, puede pasar cualquier cosa.
Thaddeus Walker Bowman Owens, es el quarterback suplente de los Chicago Stars y sus compromisos publicitarios lo obligan a lidiar con Olivia Shore, cantante de ópera que parece guardarle un odio incomprensible. Olivia no puede perdonar lo que Thad hizo y no sabe si aguantará todo un mes junto a él en la promoción de unos relojes. Entre disputas, malentendidos, amenazas de muerte surgirá atracción entre la diva y el jugador.
De esta serie no he leído ningún libro, pero eso no me ha frenado para empezar por el nueve porque ya una tiene la costumbre de hacer esto, ja, ja, ja, tampoco creo que es importante hacerlo porque pese a que aparezcan personajes secundarios de otras novelas son como mero adorno y no aportan nada a la trama. ¿Por qué he empezado por aquí? Pues porque es una novedad y porque algunas personas me lo pintaron de que iba a ser un novelón y bueno... allí estaba yo leyéndolo.
Las primeras páginas me parecieron estupendas, nuestra protagonista tiene una animadversión por Thad de aquí a la luna y no sabemos la razón. Por otro lado, Thad con su particular encanto no resulta engreído sino muy simpático y la diva logrará caernos mal porque no entendemos ese comportamiento. Esos momentos me gustaron porque entre ellos se lanzan pullas y hay momentos divertidos.
Descubierto el pastel es donde la trama se vuelve bastante menos interesante, estamos casi más de la mitad de la novela escena tras escena de promoción donde pasa alguna cosa o donde la autora nos mete intriga con lo de las cartas y las amenazas.
Hay muchas cosas por la que esta novela no me convenció, donde la encontré demasiado aburrida y he leído novelas de esta autora que me han parecido una maravilla, pero esta no ha logrado la magia.
La introducción de demasiados personajes que luego no son desarrollados o son inservibles para la trama, y no son pocos; la repetición de ideas es otra de las cosas que encontré; cortes abruptos...
Sobre Olivia la autora se ve que vuelca todo lo que ha investigado sobre el mundo de la ópera y bueno eso es increíble, pero creo que en justa medida y aquí se ha excedido. Son demasiados los datos de la vida de Olivia, su pasado, su presente con sus traumas, miedos, etc. y de Thad no comenta absolutamente nada, creo que si me apuras tenemos cinco líneas donde habla de su pasado. Quizá esto último es culpa mía por no haber leído los otros libros, (si acaso se habla de él) pero no cuesta nada dedicarle unas páginas y mencionarlo en esta novela.
Olivia es un personaje bien caracterizado, sabemos más de ella que de Thad, quizá en exceso y por eso se convierte en la protagonista principal de la novela.
Al inicio de la novela fue un personaje que no me caía en gracia, esa antipatía por Thad no la entendía, descubierta la intriga cambia radicalmente. No puedo decir que me guste especialmente, no va de superdiva, pero tampoco es modesta, ese egocentrismo no lo entendía, sus cambios repentinos de opinión... De su relación con Thad os cuanto más tarde.
Thad es jugador de los Chicago Stars, pero está en horas bajas, no entendí muy bien su puesto e importancia en el equipo siendo un jugador suplente, pero luego es vital para los otros jugadores... supongo que los que controlen el fútbol americano lo entenderán. Personalmente y careciendo de datos e información sobre su pasado y su presente en el mundo del fútbol no pude encontrarle sentido. Aparte de esto me pareció una persona inteligente, modesto y buena persona con todo lo que se vuelca con Olivia y sus problemas (y lo poco que ella se preocupa por él), ha quedado absorbido por la diva. Me ha gustado muchísimo más que Olivia exceptuando la parte final en la que no entendí esa actitud con Olivia cuando toda la novela ha estado tan al pendiente.
En la relación entre Olivia y Thad al principio me gustaron los enfrentamientos eran bastante simpáticos luego la cosa se volvió cansina, él se vuelve protector y ella fría como la nieve hasta que surge la relación amorosa y los egos se encuentran y nos marean un poco con sus ideas de relación. ¿Hubo química? Ninguna. Es que como va a haberla cuando los problemas y la vida laboral de la diva son la parte fundamental de la novela para dejar en segundo plano la amorosa.
Sin duda me gustó el final (porque se acaba la novela) porque fue más rápido y más interesante que el resto, estaba un poco harta de tanta promoción, ópera, habaneras... muy bonito todo, pero no necesito tanta información, lo que quiero es una historia de amor que me llame la atención.
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