El duque de Tresham, el soltero más cotizado y escurridizo de la sociedad, debe batirse de madrugada por haber mancillado la reputación de una doncella. Pero la repentina aparición de Jane Ingleby, empleada de una sombrerería, provoca que el duque reciba un disparo en la pierna.
Cuando Jane es despedida de su trabajo por haber llegado tarde, decide acudir a Tresham y pedirle que escriba a su jefa y le explique los hechos para recuperar su empleo. Pero él, seducido por su extraordinaria belleza e intrigado por su desparpajo, le propone que sea su enfermera hasta que esté mejor. Jane, que oculta un peligroso pasado, acepta y se instala en la mansión.
Mientras crece la atracción entre el aristócrata y la modesta dependienta, Jane vislumbra un corazón de insospechada nobleza tras esa fachada arrogante. Incluso cuando los oscuros secretos de los que huye amenazan con salir a la luz, la joven comprende que el mayor peligro de todos es la pasión que le incita a arriesgarlo todo por un mes con un caballero que parece no creer en el amor...
Jocelyn Dudley, duque de Tresham en pleno duelo por el honor de una dama sufre un disparo por la intervención de Jane Ingleby una joven empleada en una sombrerería. El duque contrata a Jane como su enfermera para que pague las consecuencias de entrometerse en un duelo entre caballeros.
La primera novela de la trilogía "Amantes" (toda ella publicada en español) en sus primeras páginas no me estaba enganchando, mayormente por la actitud de Tresham hasta que poco a poco lo vamos conociendo y me ha gustado su forma de ser.
Mary Balogh es una de mis autoras de romántica histórica favoritas, aquí nos trae a unos personajes con carácter, una historia de amor o como bien aparece en el título de amantes que se cuece a fuego lento y una intriga de por medio. No puedo pedir más.
La lectura me ha parecido bastante regular, no había momentos en que me aburriera. Me han gustado mucho esos diálogos cargados de ironía. Jane es una protagonista con todas las letras, no se corta a la hora de replicarle a Tresham, no tiene pelos en la lengua y mirad que el duque es arrogante.
Jane me ha gustado porque no es la típica protagonista inocente, ella es inteligente y una verdadera superviviente, sabe lo que hay y no le tiene miedo al duque y sus aires de superioridad.
Jocelyn (me ha vuelto a pasar… casi no me acostumbro al nombre) es como cualquier duque, alguien altivo, arrogante... pero tiene a Jane como digna adversaria. He disfrutado de esos intercambios entre los dos y como poco a poco va surgiendo el romance. La amistad y la complicidad entre ellos se ha sentido y la autora nos muestra sus lados ocultos, sobre todo la parte más "sensible" de Jocelyn. Quizás es uno de los personajes en los que observamos una mayor evolución y transformación.
En la novela ha habido de todo un poco, el maravilloso romance, la intriga detrás de Jane y todo ello sin dar vueltas de tuerca extrañas que mareen al lector.
Quién me iba a decir que me encantaría tanto Jocelyn si al principio casi no lo pasaba pero ha sido así, verlo descolocado porque se enamoraba de Jane que ha sido una digna contrincante. Ella no se cortaba y tenía las cosas claras.
Me ha gustado el cierto riesgo de la autora al traernos el tema de las amantes y plasmarlo con los protagonistas y que al final nos guste, no creo que sea fácil lograrlo. Ese momento de la relación es la parte en la que conoceremos en profundidad a Jocelyn y Jane, donde se desnudan sus almas y surge un romance de diez.
El resto de personajes nos deja con ganar de conocer a algunos de ellos. Creo que tendremos la novela de la hermana charlatana de Jocelyn (Angeline) que curiosamente transcurrió antes pero que la autora trae en el tercero de los libros. El segundo de los libros continúa con Ferdinand Dudley del que tenemos las primeras páginas. Yo estoy con ganas de leerlos todos.