Sinopsis
Hasta que llegue a la mayoría de edad, la bella Caroline Trent vive a merced de Oliver Prewitt, su codicioso tutor, y de su repulsivo hijo Percy. Y justo cuando está a punto de alcanzar esa tan ansiada libertad, Percy intenta seducirla violentamente. Caroline le dispara y huye. Asustada, decide esconderse hasta la fecha en que pueda tomar legítima posesión de sus bienes. Pero no le será tan fácil; el apuesto Blake Ravenscroft la confunde con una espía de Prewitt y la secuestra. Al darse cuenta de la equivocación, ofrecerá refugio a la joven hasta que ella pueda regresar a su finca. No es fácil la convivencia entre una chica con temperamento y un hombre que está acostumbrado a que sus órdenes se cumplan. Pero las aparentes diferencias no impedirán el inevitable surgimiento de la pasión, que tal vez se convierta en un amor para toda la vida.
Opinión personal
Caroline Trent tiene que esperar a llegar a la mayoría de edad para dejar de vivir con su odioso tutor Oliver Prewitt y conseguir su herencia. Un intento de seducirla por parte de Percy, el único hijo de su tutor, precipita las cosas y decide huir hasta que llegue su aniversario. Es ahí cuando se cruzan los caminos de Caroline con Blake Ravenscroft, un agente de la corona en plena misión que la confunde con una espía.
De nuevo comienzo una serie de la autora Julia Quinn, se trata de “Agentes de la corona” que cuenta con dos novelas y un relato corto. La primera de ellas tiene de protagonistas a Caroline Trent y a Blake Ravenscroft.
Caroline es una joven heredera, inteligente y despierta, que perdió a sus padres y desde muy pequeña ha estado dando tumbos entre familiares que la acogen, el último de ellos es Oliver Prewitt un hombre odioso que parece esconder secretos y su igualmente odioso hijo Percy. La convivencia junto a ellos es bastante complicada y Caroline desea más que nunca cumplir la mayoría de edad para vivir su vida. La avaricia de Oliver induce a su hijo a forzar a Caroline para concluir en un matrimonio y obtener esa jugosa herencia.
Blake Ravenscroft es un agente de la corona que está llevando a cabo el que espera sea su último caso, atrapar a una conocida espía española. Durante la misión confunde a Caroline con su objetivo y a partir de ahí se sucederán hechos bastante disparatados, pero también el inicio de una atracción por esa pizpireta joven.
Si algo me gusta del estilo de la autora son esas situaciones tan disparatadas que presenta y los maravillosos diálogos. Esta primera novela me ha parecido muy divertida y me encantaron los protagonistas. Caroline es una joven inteligente y despierta que traerá de cabeza al solitario y gruñón agente. Blake tiene un triste pasado que lo lastra y Caroline es capaz de romper todas sus barreras. Entre ellos se nota la química y hay momentos de todo tipo entre ellos: tiernos, divertidos y pasionales. La novela se me ha pasado en un suspiro, junto al romance tenemos la parte de espionaje y su intriga correspondiente.
Como personaje secundario, James Sidwell, marqués de Riverdale (otro de los espías), nos dará momentos bastante divertidos, esperemos que no cambie mucho su personaje en “Cómo casarse con un marqués”.
El final de la novela ha estado bastante bien y encima el epílogo se traslada bastante en el tiempo así que sabremos un poco más de los protagonistas después de dar el “sí, quiero”.
En general, la novela me ha encantado, más que nada, por los enredos que la hacen muy divertida y amena. La pareja tampoco se queda atrás y me han conquistado los dos, un romance bastante adorable.
Puntuación: 🌟🌟🌟🌟🌟
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