Reseña: La boda de la Temporada (Plantadas en el altar 1) - Laura Lee Guhrke

Sinopsis

Ser plantada es horrible para una chica.

Sobre todo si tu prometido era también tu amor de la infancia, tu príncipe azul y el apuesto y granuja duque en torno al que has construido todos tus sueños. Y es aún más horrible si te deja dos semanas antes de la boda y se marcha a Egipto. Una joven tardaría mucho tiempo en superar esa clase de humillación.

Pero, ¿y si seis años después, la víspera de su boda, él regresa y decide que quiere recuperarte? Le dirías que es una lástima. Pero ¿y si es tan seductor, apuesto, pícaro y encantador como siempre? ¿Y si su regreso despierta todas las antiguas pasiones que creías haber vencido? ¿Y si te sorprende anhelando el pasado y cuestionando el futuro? ¿Y si tienes que pasar todo un mes en la misma fiesta con él y con tu nuevo prometido?

Bueno, para lady Beatrix Danbury, ese tipo de situación es más que espantosa. Es imposible. Es intolerable. Es una pesadilla. Pero también podría resultar ser su sueño hecho realidad.

Opinión personal

Hace seis años Beatrix “Trix” Danbury fue plantada a pocos días de su boda por el que fue su prometido William “Will” Mallory, duque de Sunderland.

 

Ahora él ha regresado pocos días antes de que Trix se case y todo su mundo parece volver a desmoronarse.

 

Primera historia de la serie “Plantadas en el altar” y como su propio título indica tenemos a una joven “abandonada” a poco días de casarse pero los motivos por los que su antiguo prometido la abandona los iremos conociendo poco a poco.

Así que tenemos una historia de segundas oportunidades, un novio a la fuga que regresa y una mujer que teme por que una vez más todo se derrumbe.

 

El cincuenta por ciento de la novela estuve odiando (y aburriéndome con la lectura) al personaje de Will, pues su “obsesión” por descubrir la tumba de Tutankamón en Egipto me sacaba un poco de quicio puesto que era poco empático por la pobre de Trix que tuvo que soportar lo que en una chica de la época era el acabose. Y es que Will es egoísta y no siente nada de culpa por todo lo acontecido hace seis años y sus sentimientos por Trix dejan mucho que desear así que creo que es normal que no simpatice con él.

En esta parte empatizo mucho con Trix que ha tenido que lidiar con la situación y retomar su vida y justo en el momento en el que lo consigue se presenta su ex prometido para poner todo del revés.

 

Después de cierto hecho en una playa que creo que se podría decir que es el otro cincuenta por ciento restantes de la novela, mis impresiones sobre Will van cambiando poco a poco, puedo decir que me conquista. La autora desvela el momento de la ruptura y los personajes se sinceran, tanto Will como Trix se dicen las cosas claras y podemos conocer los dos puntos de vista y entender mejor todo. Y esta parte me gustó mucho porque sueltan todo lo que sienten y es difícil no comprender cada una de las partes.

 

Will era muy joven, con sueños y no quería arrepentirse en el futuro por dejarlos atrás. Trix era una joven influenciable, conformista y quizá en el momento sus miedos pudieron más que con lo que de verdad deseaba hacer.

 

Pero aquí llegan las segundas oportunidades y Will, descubriendo que aún tiene sentimientos por Trix decide reconquistarla y ¡qué bonitos y divertidos momentos se marca el duque! Es que es difícil no perdonarlo porque le abre los ojos a Trix y le muestra todas las posibilidades que se le abren.

 

El romance me pareció algo flojo porque en mayor medida Trix no se entregaba, lógicamente ella temía el volver a ser abandonada. Solo las escenas de los retos de Will mejoraban los momentos entre ellos dos.

 

En cuanto a personajes secundarios solo mencionaré a dos: a Julia, que me pareció espléndida y a un relleno que hizo la autora con Aidan. Solo espero poder leer su novela que es precisamente por ella por la que he empezado esta serie puesto que está bastante bien valorada la historia de Aidan y Julia.

 

En cuanto a la parte final me faltaron páginas, hubiese sido bonito ver a la pareja juntos y como se desenvolvían. Lo del descubrimiento no me importa tanto porque la autora deja la conocida frase del real Howard Carter y sabemos qué es lo que va a pasar con la tumba de Tutankamón.

 

En resumen, la novela no me ha fascinado pero sí me ha gustado la segunda parte porque se ponen en la palestra a los dos personajes y surgen todos los sentimientos.

Puntuación: 🌟🌟🌟

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